Parque urbano, Ibiza

El diseño de este parque ha sido concebido como un espacio versátil que se adapta a las necesidades cambiantes de la comunidad a lo largo del tiempo. En su disposición, adopta la forma de un parque urbano en el lado más próximo a los futuros bloques de viviendas, mientras que del otro lado se integra armoniosamente con un tratamiento periurbano o forestal. En el centro del parque, se han incorporado áreas abiertas que permiten usos improvisados por parte de los usuarios, con una cobertura de herbáceas anuales. Se ha prestado especial atención a los elementos paisajísticos tanto dentro como fuera del área del parque, maximizando la influencia visual de las montañas al oeste y Dalt Vila al este. El trazado de paseos y áreas de descanso ha sido cuidadosamente diseñado para integrar el espacio con su entorno natural. Además, se ha respetado y realzado el sistema de muros de piedra seca existente, al tiempo que se han desarrollado nuevas estructuras para una variedad de usos. La disposición de las zonas ajardinadas sigue una orientación norte-sur, aprovechando la morfología agraria preexistente y los drenajes naturales, y creando un pasillo visual desde los futuros bloques de viviendas hacia el parque.